El informe de la Organización Mundial de la Salud "Salud para los adolescentes del mundo" reveló que la depresión es la causa predominante de enfermedad y discapacidad y una de las tres principales causas de mortalidad de los adolescentes de ambos sexos. Estudios recientes señalan los efectos duraderos de la depresión en la adolescencia, incluyendo el riesgo de resistencia al tratamiento en la edad adulta.

En esta línea, ahora es necesario entender mejor cómo las trayectorias de los cambios neurales y cognitivos durante la adolescencia, particularmente a nivel subclínico, predecirán la resistencia o la vulnerabilidad a la DMD y usar este conocimiento para refinar los enfoques tradicionales de intervención y para desarrollar componentes de intervención novedosos que apunten mejor a los mecanismos de desarrollo de riesgo. Es necesario mejorar la prevención, en particular los enfoques específicos que abordan las necesidades de las personas más vulnerables a la depresión.

Utilizando tres cohortes excepcionales que han completado recientemente el seguimiento a largo plazo de adolescentes con riesgo variable de depresión, buscaremos desviaciones de las funciones cerebrales y cognitivas implicadas en la transición a la depresión de inicio temprano y posteriores a la depresión de inicio temprano; y reclutaremos nuevas muestras para determinar el papel de estas desviaciones en la respuesta al tratamiento. Las cohortes son las siguientes:

1) Proyecto de Intervención Temprana de Bucarest (BEIP)
2) IMAGEN cohorte europea y
3)CoVenture/NeuroVenture cohorte canadiense.

Las medidas estarán altamente armonizadas entre los experimentos en animales y los análisis en humanos, incluyendo enfoques de intervención complementarios.

El papel causal de los factores cerebrales o ambientales en las desviaciones de las funciones cognitivas y los comportamientos, y en la respuesta a la intervención, se probará en estudios con animales y utilizando las bases de datos existentes de jóvenes en riesgo. El consorcio ADORe llevará a cabo investigaciones en humanos y animales, con el objetivo de proporcionar componentes de intervención novedosos para individuos en riesgo durante el período crítico de la adolescencia. Las investigaciones se centrarán en las regiones centrales del cerebro y en las funciones cognitivas (recompensa, memoria, respuesta al estrés y pensamiento autorreferente) que se desarrollan en la adolescencia y que son relevantes para el riesgo de depresión. En el último año del proyecto se identificarán, adaptarán y ensayarán prometedoras intervenciones neurocognitivas específicas a nivel de prueba de concepto en dos muestras de adolescentes en situación de riesgo: una resistente a la intervención psicosocial y otra expuesta a graves adversidades en la infancia.

Las medidas neuronales y cognitivas-conductuales estarán altamente armonizadas entre los estudios y las especies. Al centrarse en la correspondencia entre los sistemas cerebrales y las funciones cognitivas y emocionales, nuestro proyecto proporcionará nuevas perspectivas sobre los mecanismos que subyacen a la aparición de la depresión en la adolescencia y su papel en la depresión, y potencialmente avanzará el conocimiento en la prevención y el tratamiento de la depresión en la adolescencia, un campo que no ha progresado sustancialmente en los últimos años.